By ZumbataCANNABIS PARA ALIVIAR EL DOLOR
CANNABIS PARA ALIVIAR EL DOLOR
Durante miles de años, los preparados de cannabis se han utilizado para tratar el dolor. Se han descrito sus usos, entre otros, como analgésico en operaciones, como antiinflamatorio, como antídoto contra la gota, contra la neuralgia (dolor de nervios), la migraña y el dolor de muelas, y también como remedio contra los dolores menstruales. Los mecanismos de acción para la terapia del dolor mediante cannabinoides están muy bien investigados y demuestran su notable efecto en múltiples ocasiones. La inhalación de cannabis suele evitarse porque los efectos duran poco y, por lo tanto, es necesario administrarla varias veces. Por lo general, se prefiere el cannabis oral porque sus efectos duran muchas más veces e incluso puede tratar el dolor crónico.
También se ha demostrado que el THC reduce el dolor fantasma tras una amputación. Varios estudios compararon a pacientes con espasticidad dolorosa tras una lesión medular. A algunos de ellos se les administró 5 mg de THC, a otros 50 mg de codeína y al grupo de control un placebo. El resultado fue que el THC y la codeína eran analgésicamente superiores al placebo. Sin embargo, de los dos fármacos eficaces, el THC fue superior a la codeína y redujo significativamente la espasticidad.
Otro estudio demostró que el extracto de THC/CBD aliviaba mejor el dolor en 24 pacientes con síntomas neurogénicos (dolor nervioso) que el placebo.
A un paciente con dolor abdominal que recibía 30 mg diarios de morfina para la analgesia se le administraron 10 mg de extracto de THC / CBD cinco veces al día durante seis semanas. El CBD contrarresta los efectos psicotrópicos y de alteración del comportamiento del THC. Se midieron las necesidades de morfina y la intensidad del dolor en la fase de THC/CBD y en una fase de placebo. La necesidad de morfina pudo reducirse muchas veces en la fase THC/CBD (p <0,001).
Se observó una importante reducción del dolor en 10 pacientes con cáncer cuando se administraron 5, 10, 15 y 20 mg de THC oral en comparación con placebo. En 12 mujeres, se administraron dosis de extractos sublinguales de THC de 2,5, 5 y 7,5 mg tras el dolor postoperatorio de una histerectomía. El alivio del dolor fue óptimo a las 2 horas y no duró más de 3 horas. Cuando el THC se administró en forma de cápsulas, el efecto duró más y, al cabo de seis horas, sólo la mitad de lospacientesnecesitaron analgésicos adicionales.
En general, cabe mencionar que el consumo de cannabis como analgésico tiene efectos secundarios como la somnolencia o la sensación de colocón, pero éstos también deben sopesarse frente a los efectos secundarios nocivos y muy diferentes de la morfina.
INFORMACIÓN GENERAL SOBRE EL DOLOR
El dolor es una percepción sensorial compleja que, de forma aguda, pretende ser una especie de señal de alarma para el organismo (dolor nociceptor). Si el dolor es crónico, suele ser consecuencia de daños en el sistemanervioso (dolor neuropático) y constituye un cuadro clínico distinto según la medicina actual. El dolor también suele ser consecuencia de trastornos funcionales reversibles (por ejemplo, migrañas debidas a una mala regulación de la circulación sanguínea).
El dolor se transmite a través del cuerpo mediante fibras nerviosas. Especialmente en el caso del dolor crónico, la persona afectada experimenta no sólo los síntomas que actúan sobre el cuerpo, sino también, por lo general, el daño socio-psicológico, que puede cambiar por completo el comportamiento de la persona en público. Además del dolor crónico, en un gran número de pacientes con cáncer avanzado, por ejemplo, se producen los llamados ataques de dolor, que tienen un gran impacto en la calidad de vida. Estas formas de dolor irruptivo pueden producirse incluso con un tratamiento del dolor generalmente adecuado.
El dolor suele tratarse con opiáceos (por ejemplo, morfina, fentanilo y metanona) y analgésicos no opiáceos (por ejemplo, derivados del ácido salicílico). También se utilizan fármacos adaptadores (por ejemplo, antidepresivos) para influir en la causa del dolor. La elección de la medicación adecuada suele adaptarse individualmente.